COPA SUDAMERICANA
Triste final
San Pablo quebró a Tigre a los 22 minutos, con un gol de Lucas, y luego Osvaldo puso el 2-0 para sentenciar el partido. Sobre el final vinieron los incidentes y el desenlace vergonzoso.
Impensado lo que ocurrió en el Morumbí, en plena final de la Copa Sudamericana. San Pablo, el equipo poderoso, tenía toda la fiesta preparada y, como demostró con fútbol, podría haber ganado el título de manera justa. El local tenía el 2-0 en el bolsillo al final del entretiempo y Tigre no daba señales de reacción. Sin embargo, un encontronazo previo al entretiempo derivó en violencia hacia los jugadores del Matador en el vestuario y, ante la negación de la visita de salir a jugar el complemento, la Conmebol decidió concluir el partido y declarar campeón al San Pablo.
Tigre había salido a jugar la final de igual a igual y aguantó hasta donde pudo. Pasaditos los 20’, apareció la joyita del San Pablo para poner el 1-0. Con 20 años, Lucas Moura jugó su último partido con el equipo brasileño (su pase le costó 43 millones de euros al PSG) para consagrarse, ya que luego asistió en el segundo grito, para que Osvaldo definiera con una linda vaselina.
Hasta ahí era todo de San Pablo y Tigre se mostraba golpeado. Pero cuando sonó el silbato del entretiempo, los jugadores se agarraron dentro de la cancha. Quizás, algo común en una final. No lo fue lo que ocurrió después, camino al vestuario visitante, cuando a los de Tigre les pegó y amenazó la policía. Sí, el local festejó la Copa, en un triste, tristísimo final
COPA SUDAMERICANA
"Un arma en el pecho"
El encargado de seguridad de Tigre contó al detalle lo que les pasó y que le apoyaron un revólver en el pecho a Albil. "Fue una emboscada", dijo.
"Fue una emboscada. Nos estaban esperando. Botta quedó con el ojo cerrado, a Albil le pusieron un arma en el pecho, Gastón Díaz estaba lastimado. Incluso una persona del San Pablo que el día anterior estaba con el tema de la seguridad, se sumó a pegar". Relato terrible de un hombre de la organización de la seguridad de Tigre, Rubén Pasquini. El, como otros de la delegación, estaba golpeado en la cara, hinchada.
Caos en el Morumbí, en la final de la Sudamericana. Grave agresión de la gente de seguridad paulista a la delegación de Victoria. Increíble el relato del hombre de seguridad en pleno campo de juego. Dejó en claro que "fue una emboscada de la gente de seguridad, estaba todo armado". Y contó al detalle como sufrieron al regresar al vestuario al final del primer tiempo.
Caos en el Morumbí, en la final de la Sudamericana. Grave agresión de la gente de seguridad paulista a la delegación de Victoria. Increíble el relato del hombre de seguridad en pleno campo de juego. Dejó en claro que "fue una emboscada de la gente de seguridad, estaba todo armado". Y contó al detalle como sufrieron al regresar al vestuario al final del primer tiempo.
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