Ser ANTI es masticar
el odio día a día buscando justificar lo injustificable. Un odio infundado pero
infundido por intereses de personas en particular.
La palabra anti siempre me ha generado rechazo. El solo
hecho de escuchar a un persona de decir "Soy anti-lo que sea" ya me
genera rechazo.
Esa pequeña palabra de cuatros letras, ese prefijo, sintetiza todos los prejuicios que una grupo social tiene sobre otro. Como una manera de justificarlo, de aceptar y hacernos creer que “está bien lo que se hace”. Fundamentado en el odio, el rencor y la persecución. Y otro sin fín de emociones completamente negativas.
Por eso, no puede más que generarme rechazo. A pesar de significar originalmente "Que protege, previene, que es opuesto, contrario o lucha contra", la tergiversación intencional del lenguaje por parte de los profetas del odio, han transformado esta palabra en una manera de justificar las persecuciones raciales e ideológicas.; xenofóbicas, homofóbicas y todas las x-fóbicas que puedan sumarse
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| Fuente: http://loshuevosylasideas.blogspot.com.ar/2011/12/el-odio-ciega-al-antikirchnerismo.html |
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Es decir, bajo el odio -que generalmente es infundado e
infundido por quienes ostentan el poder- esta palabra no es más que una manera
de justificarlo a él y a todas las personas que padecen de ese síntoma. Porque
de algo estoy seguro: el odio es una enfermedad y los que odian sin sentido,
están enfermos.
Por eso, tenemos que luchar para dejar de ser ANTI´s. Pensar
distinto no es motivo para odiar.
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